viernes, 25 de mayo de 2018

25 05 1938



 

Triste efemérides de un hecho trágico, acaecido hace ahora ochenta años, que une a dos tierras del Mediterráneo, Alicante y Mallorca.

A las 8’10 h. de la mañana, despegó de su base en Mallorca una escuadrilla de bombarderos italianos del tipo Savoia S 79 “sparviero”, con tripulación del mismo país, que, tras dar un rodeo y hacer una aproximación desde tierra para no ser detectados por los servicios de vigilancia antiaérea,  comenzaron su criminal acción. Sobre las 11’15 horas, comenzaron a caer, con casi precisión milimétrica, bombas sobre el Mercado Central de Alicante. Es cierto que cayeron algunas bombas en otros lugares de la ciudad, pero el grueso del bombardeo lo sufrió el mercado.

No hay una cifra exacta de víctimas mortales. Muchos cuerpos eran amasijos de carne. Pero, según casi todas las estimaciones y cálculos, estarían entre las 00 y las 320 víctimas mortales, y los heridos de mayor consideración fueron innumerables, ya que se dio la triste coincidencia de que ese día, miércoles, el mercado se encontraba especialmente concurrido por haberse anunciado que habría pescado a la venta.

Mi familia, que vivía justo enfrente del mercado, con mucha prudencia y siempre a personas de confianza, pues en Alicante la represión fue muy larga y dura, narraba horrorizada, aún muchos años después, que los restos humanos se cargaban en camiones para llevarlos a la fosa común donde fueron enterrados, mientras la sangre salía por las puertas arrastrada por el agua de las mangueras empleada para limpiar el edificio.

Durante décadas, el tema del bombardeo fue tabú, e, incluso, se oyó algún comentario exculpatorio diciendo que había sido realizado como represalia por el ataque de un avión gubernamental a una manifestación religiosa. Incluso se sembraron rumores interesados sobre que había habido error en la trayectoria de caída de las bombas, o que se confundió el mercado con una instalación militar. Cualquiera que conozca Alicante, o que sea capaz de interpretar un plano, y los aviadores se sobrentiende que son perfectamente capaces de interpretarlos, verá que la forma peculiar del mercado lo hace inconfundible, y que el posible objetivo militar más cercano era el puerto, situado a más de un kilómetro.

No se puede menos que comparar la diferente repercusión internacional entre el bombardeo de Guernica y el del Mercado Central de Alicante, pues, a pesar de que en la localidad vasca los muertos estimados están entre los 120 y los 300, y los de Alicante superaron los 300, este episodio es completamente desconocido, en tanto que aquel tuvo repercusión mundial, en parte debido a la obra que realizó Picasso y a la numerosa bibliografía sobre el hecho...

Conclusiones:

A)    La publicidad de los grandes publicistas es un arma inigualable para colocar un producto en la sociedad.

B)    Si pierdes la guerra, te escribirán la historia.

Publicado en Fundación Gadeso - Fòrum el 25 05 2018

viernes, 18 de mayo de 2018

Me duele el mundo



Hay días que creo que no merece la pena que un primate se enderezara y se pusiese a andar. Esta semana, está llena de  ellos. Para comprenderlo, no hay más que abrir un periódico, escuchar un informativo, o entrar en las redes sociales.

Un americano todopoderoso quiere incendiar el mundo, y toma una serie de decisiones que hacen inevitable  la exaltación de los ánimos, la violencia, y, por tanto, las matanzas.

¿Tan necesario es que el comercio de  armas se deshaga de sus stocks en una guerra?, ¿Tan seguro está de que esa guerra se localizará en el  oriente cercano?

Su estrategia, si es que se le puede llamar así, y no llamarle los caprichos interesados de un delirio, resulta, cuanto menos, temeraria. Agitar las exacerbadas pasiones en este entorno puede traer consecuencias universales, y expandirse de forma totalmente incontrolada.

No pretendo ser imparcial o equidistante, me horroriza el terrorismo, especialmente el indiscriminado, pero más me horroriza el terrorismo de estado. Puedo entender el derecho a defenderse de las personas, e, incluso, haciendo un esfuerzo mental, de un estado, pero siempre con una fuerza proporcionada. Sin embargo, esta respuesta desproporcionada puede llevarme a  tener una visión desenfocada  de la situación. Es posible que esté equivocado, pero, como siempre, reivindico mi derecho a opinar, y, por tanto, a errar en mis juicios.

Israel es un polvorín, con un gobierno sionista de extrema derecha, que se sabe impune por la mala conciencia europea por su posición en el Holocausto, y por el apoyo incondicional de los Estados Unidos, que veta todas las resoluciones de Consejo de Seguridad  de la ONU. Además, son el pueblo elegido por Dios, y, en consecuencia, cualquier actuación es por ello justificada.

¿Entonces, los pueblos árabes son las víctimas de los malvados judíos? Tampoco es tan clara la cosa. A pesar de la historia oficial de que el pueblo judío tuvo que abandonar Israel en la diáspora, lo cierto es que siempre han habido judíos en Palestina, que estaban allí junto a los palestinos, también que durante el periodo Nazi fueron bastantes las familias que regresaron a su tierra ancestral. Tampoco es menos cierto que compraron grandes extensiones de terreno a los propietarios árabes, y que, gracias a esas compras, lograron ocupar una extensión considerable de terreno.

Después, las dos facciones terroristas, la árabe y la sionista, se dedicaron a asesinar a rivales, y, de paso, a los que se encontraban por allí.

El resto es cosa sabida: La votación del reconocimiento del Estado de Israel; las guerras iniciadas y perdidas por los árabes, que redundaban en la ampliación de las fronteras israelitas,  desoyendo las disposiciones de la ONU al respecto (con la inestimable colaboración de los EEUU);  y las Intifadas. A pesar de escaramuzas, bloqueos, algunos misiles contrarrestados con incursiones, siempre en detrimento del pueblo palestino de la franja de Gaza, la situación, aún dentro de la conflictividad, permanecía en un equilibrio muy inestable, pero en equilibrio. Cuando a ningún estado se le ocurrió reconocer a Jerusalén como capital de Israel, para evitar un nuevo motivo de discordia, al Sr. Trump, no se le ocurre otra cosa que trasladar su embajada allí, dándole reconocimiento oficial a lo que los israelís decían en voz baja. Cualquiera que fuese capaz de conectar dos neuronas de su cerebro sabía de antemano lo que iba a ocurrir ¿Lo sabía Trump?

Creo que lo que voy a decir a continuación va a resultar muy ofensivo para muchos, pero no dejo de preguntarme ¿A algún progenitor no fanatizado se le ocurriría llevar a sus hijos pequeños a un lugar donde se sabía que iba a haber enfrentamientos armados? Con ello, no intento justificar, ¡ni mucho menos!, la actuación israelí y la decisión de utilizar munición real, pero sí introducir una reflexión en el tema de los menores muertos.

Pero las maniobras del  Presidente de los EEUU  en esa parte tan conflictiva del mundo no se reducen a este caso. Denuncia y deja sin efecto el pacto sobre temas nucleares con Irán, que fue tan difícil de lograr, anunciando, además, sanciones económicas a los países que incumplan sus disposiciones. ¿ A quienes? ¿A sus potenciales aliados, los europeos? ¿Quiere tener una excusa para invadir Irán y sus campos petrolíferos? ¿Quiere acabar con el Islam? Este desafío a la paz, aparentemente, es contrario con su acercamiento a Corea del Norte, a no ser que quiera tener concentrados a sus enemigos en una sola zona.

Pero también me duele el mundo por los atentados en París, y, sobre todo, en Indonesia, donde una familia al completo se inmola por una religión, para asesinar al mayor número de adeptos a otra religión.

¿Quién dijo que Dios es amor?

viernes, 11 de mayo de 2018

Sentido del humor




Hasta la entrada en circulacióndel euro, en España era frecuente ver, a pesar del tiempo transcurrido, monedas que en el reverso llevaban la inscripción “Caudillo de España por la gracia de Dios”. Indiscutiblemente, mi sentido del humor no coincidía con el de Dios, ya que no considero ni una gracia ni una broma que un sangriento dictador rigiera los destinos de España durante cuarenta años, pero, la cosa era así.

Tras la muerte del mencionado dictador, y con la promulgación en 1978 de la Constitución española, los mecanismos  para los nombramientos  de los poderes públicos variaron, al menos en  teoría,  pasando ser estos designados por el pueblo español ya que en él reside la Soberanía, relevando, al menos formalmente, a las divinidades  en esos menesteres.

Hablando de Dioses, me surgió una duda, y me fui a la fuente, la citada Constitución, para comprobar si, en mis reiteradas lecturas de la misma, me había pasado por alto algún párrafo. Tras una cuidadosa y escrupulosa búsqueda en el Título VI Del Poder Judicial, desde los artículos 117 al 127, ambos inclusive, y en el Titulo IX Del Tribunal Constitucional en  sus siete artículos (del 159 al 165) me he asegurado de que en ninguna parte indica, ni tan siquiera insinúa, que a los jueces, cualquiera que sea jurisdicción o cargo, por el hecho de serlo se les otorgue el don de la infalibilidad, y, a partir de esta carencia, podemos hacernos algunas reflexiones:

a)      No acabo de entender que, si la Justicia emana del pueblo ¿Por qué el pueblo no puede opinar, e incluso, criticar a la Justicia?

b)      Si se debe respetar al Poder Legislativo ¿Por qué el Poder legislativo puede no respetar  al pueblo, ya que de él,  como he dicho anteriormente, emana la Justicia, según determina el artículo 118, párrafo 1º, de la Constitución? Esta falta de respeto queda palpable en las declaraciones del Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra cuando llama impunemente “turba enfurecida” a los que criticaron la sentencia sobre “La Manada”.

c)       Si los jueces pueden criticar al Poder Ejecutivo y a sus miembros ¿Por qué el Poder Ejecutivo no puede criticar al Poder Legislativo y a sus miembros?

d)      Además de respetar las sentencias, se dice que se deben acatar. Bien está que los tribunales deben interpretar y hacer cumplir las leyes, pero ¿Cómo se puede acatar una sentencia si, disponiendo de posibles, puedes recurrirla a instancias superiores, e incluso a Tribunales Supranacionales, en donde, con frecuencia, son rechazados los veredictos que, supuestamente, se deben acatar? Entre los casos más notorios está el referente a la llamada “Doctrina Parot”.

No sé si por algún motivo se necesitan nuevas santas y mártires en los altares, y la Justicia de este país, para suplir esta carencia, pretende que cunda el ejemplo de María Goretti, que fue asesinada para evitar que la violasen, o es que no se comprende algo tan sencillo como “NO, quiere decir no”, es decir, una negación en toda regla. O es que acaso, los jueces que juzgaron el caso de “La Manada” creen que una mujer que va sola por la calle en unas fiestas populares merece ser violada de forma múltiple.

¿Pero qué justificación dan otros jueces ante una violación a una menor paralizada por el pánico?

Más que modificar el Código Penal, que también es mucho más urgente variar la mentalidad de algunos y algunas jueces y juezas. Claro que, en unos tribunales que, en su mayor parte, están presididos por un crucifijo, y donde se toma declaración a los testigos bajo juramento (jurar es poner a Dios por testigo, por si alguien lo había olvidado), y dado el talante misógino de la Jerarquía eclesiástica española ¿Qué se puede esperar?

viernes, 4 de mayo de 2018

Mageritense comunitatem

 




Como ocurre con muchos otros virus, no se sabe exactamente su origen. Hay algunos precedentes que podrían ser causados por él, como los casos Zeus y Torcal en Baleares, o el caso Filesa, o incluso aquel en el que el paciente fue el Tesorero del PP, el Sr. Naseiro, o la delirante gestión del GIL en la costa malagueña. Como eran casos aislados, y no una infección generalizada, no se investigaron a fondo sus orígenes, y se desconoce si el ADN del virus es idéntico, e, incluso, si el virus actual es una mutación de alguno de aquellos.


Dejando de lado el origen, lo que sí se sabe es que el actual se desarrolló de una manera geométrica a raíz del llamado Tamayazo. Desde entonces, hay síntomas  suficientes para que las autoridades sanitarias hayan tomado medidas profilácticas contra tres de los cuatros Presidentes de la Comunidad de Madrid. En la única ex – presidenta aparentemente no contagiada, se está estudiando intensamente si es que tiene la infección latente, o es que las personas que padecen el “síndrome infantil” (ya descrito hace dos semanas en estas mismas páginas) son inmunes  por naturaleza al virus.

Las características más comunes de la enfermedad se manifiestan con los siguientes síntomas: Sensación de impunidad, afán de enriquecimiento a costa del dinero público, amor por sus amigos y familiares, que se manifiesta en el deseo que también se lucren, y no devolver, bajo ninguna circunstancia, el dinero adquirido en el proceso de infección. Por otra parte, la mayor virulencia se ha desarrollado en el entorno de la construcción, tanto de obra pública como civil. Su distribución geográfica ha sido muy extensa, pero la mayor incidencia se ha dado en la Comunidad de Madrid, con los episodios de Gurtel, Púnica y Lezo. Sin embargo, el contagio más virulento se ha dado en la Comunidad de Valencia, donde es casi imposible abrir un cajón y no encontrar huellas de la infección. Un caso muy atípico se ha dado en Baleares, donde la influencia del virus sólo se notó en el Presidente, y en casi toda la directiva de un pequeño partido, ya desparecido, que tuvo una gran influencia por su efecto de contrapeso de la balanza. Muchos de sus dirigentes están en residencias sanitarias, pero, al igual que todos los afectados, no han devuelto ni un euro.

No crean que la enfermedad sólo ataque a miembros del PP y afines, nada más lejos de la realidad. Actualmente no pueden ser más distantes las posiciones del PP y de los herederos del CDC. Y también  a  estos últimos les atacó de pleno el mal, en especial a toda la familia del ícono histórico, y máximo dirigente durante décadas, con el episodio del 3%, y su variante lírica del Palau.

Hay una extraña mutación por tierras sureñas en la que, en vez de contaminarse las personas relacionadas con el ladrillo, lo han hecho las que han estado relacionado con cuestiones de ERE’s y jubilaciones, por lo que se piensa que puede ser una mutación de la cepa original.

Eso sí, por el momento, todos los casos han estado relacionados con dirigentes autonómicos, pero queda el resquemor de que se haya extendido en una situación letárgica a los dirigentes estales. Pero eso sólo es una hipótesis que se podría demostrar, o no, con un cambio de gobierno, o con un tratamiento de “tirar de la manta” por los infectados hasta el momento.

Continuaremos siguiendo la evolución de la pandemia para mantenerles informados de la situación sanitaria del país (o países según la sensibilidad de cada uno).