Antes
de comenzar con el tema, quiero introducir dos cuestiones previas
a) Tenía previsto continuar con el tema
comenzado la semana anterior analizando, bajo mi punto de vista, cómo el resto
de los partidos políticos que no analicé, también nos lo ponen difícil para
optar por esto a la hora de otorgarles el voto, pero un par de cuestiones
sucedidas, y que a mi parecer deberían colmar el vaso de cualquier demócrata,
me obligan éticamente a postergar el tema para una próxima semana.
b) En este escrito, no me refiero a los
demócratas de derechas, que indudablemente los hay, y que incluso han votado al
P.P. ya que, hasta ahora, era la única opción no nacionalista, que en programa
y en teoría se aproximaban más a la concepción de sus valores.
La gente del PP ha demostrado, lejos de
cualquier duda, su carácter anti democrático, sus modales groseros y su falta
de la más elemental educación. Cosas que
a la vista de los hechos son una cuestión evidente.
Empecemos por el que es Presidente de la Nación, para vergüenza de
todos los ciudadanos ¿Quién es él para decirle un miembro de un Parlamento cuya
formación ha sido elegida por millones de personas que no vuelva a hablar? Ni en la República de Venezuela, de la que
tanto abomina su formación, se le ocurría al Sr. Maduro mandar callar a un
oponente. Se conoce que la mala educación del Borbón mandando callar al
entonces Presidente Chavez, ha creado
escuela. El tal Rajoy, no puedo llamarle señor, ni se ha disculpado, ni se ha
percatado de la gravedad del hecho, ya que la fuente en la cual se inspira eran
las Cortes Franquistas, y allí no cabían las voces opositoras.
Continuemos con la Presidenta del Congreso en
funciones y Vice Presidenta primera Villalobos (tampoco puedo llamarle señora),
con una desfachatez y menoscabo de su puesto y de la función que representa, se
dedica a jugar con una “tablet” durante el Debate del Estado de la Nación. Por
cierto, la “tablet” y el tiempo para jugar la pagamos los contribuyentes y de
forma harto generosa. Creo que en las
antes mencionadas Cortes Franquistas, se tenía más respeto a los asistentes y a los tercios que decían representar que Villalobos a los Diputados y al pueblo
soberano (en teoría) a los que representa.
Y no, no es una cuestión de Rajoy o
Villalobos, es una cuestión de todo el PP, por varias razones:
1º) No han entendido, ¿Cómo lo van a entender
si tienen el origen que tienen?, Que la democracia consiste en un relación
entre mayorías que gobiernan y minorías que se oponen, pero siempre guardando
el respeto a los otros.
2º) Es una cuestión del P.P. y no de personas
particulares, por muy alto sea el cargo que ostenten, ya que nadie de esa formación
ha exigido responsabilidades por la burla y el insulto a nosotros, porque al no
dar explicaciones y pedir disculpas, nadie ha tenido ni un ápice de dignidad para devolver el
carnet para no cohabitar con personas de tal jaez.
Pero si alguna duda pudiese quedar de la
catadura ética del P.P., su reacción de culpar al fotógrafo que documentó la
iniquidad de Villalobos, creo que quedan disipadas.
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