Aprovechando la tranquilidad de haber pasado las
elecciones generales, y que tenemos una pequeña tregua hasta la vorágine de las
elecciones locales y europeas, vamos a tratar de hacer un pequeño repaso a los
vencedores y vencidos.
Ante todo, separemos el análisis que
tradicionalmente hacen los partidos en el cual, según cada uno de ellos, el
triunfador de la noche es el partido de quien hace la valoración, aunque sus
resultados hayan sido paupérrimos.
Por tanto, podemos decir, sin lugar a equivocarnos,
que hay varias valoraciones, y que muchas veces son antagónicas:
a)
La valoración subjetiva que viene
marcada por el número real de votos, y, especialmente, su traducción en parlamentarios
b)
La subjetiva y que, de cara a los que no pertenecen o simpatizan con
el partido, resulta más falsa y alambicada, y en la que, generalmente,
presentan sus resultados como un gran triunfo, y si aceptan alguna crítica con respecto a su campaña no se
debe a errores propios sí no a causas exógenas
c) Hay una tercera valoración, y
esta es más difícil de analizar desde fuera, pero e para mí es quizás la
más importante, no tan sólo en una elcciones si no en cualquier aspecto, y es
si se han cubierto las propias expectativas.
Veamos
ahora como, en mi opinión, han ido las elecciones para cada Partido:
1)
PSOE. Excelente en los tres
apartados. No creo que ni en sus delirios oníricos esperasen el resultado que
han obtenido.
2)
PP. Muy mal en todos los apartados.
No han sido capaces, y con razón, de encontrar ningún aspecto para considerarse
triunfadores. Ponen la excusa de la fragmentación de su nicho de votantes, pero
en ningún momento en la unión reconocieron que sus votos se veían favorecidos
por la Ley d’Hont, ni que la izquierda, con sus genes cainitas, luchaban
en desventaja al ir por separado, al igual que han hecho ahora.
3)
C’s. Triunfadores en los dos
primeros apartados, ya que han tenido un gran incremento en votos y escaños. En
el apartado c) tengo mis dudas ya que, aunque se han aproximado al PP, no han
logrado el objetivo que siempre han manifestado: ser el partido más votado del
centro derecha y liderarlo.
4)
Unidas Podemos. Otro de los grandes
derrotados. Su pérdida de votos y escaños ha sido espectacular. Y, dados los
resultados del PSOE, no creo que pacten una alianza estable para gobernar en
coalición.
5)
Vox. Ganadores en los apartados
primeros. Si tenemos que hacer caso de sus afirmaciones (¿bravatas?), en el
apartado tercero no han conseguido sus objetivos que hablaban de 60 ó 70
parlamentarios y de ser decisivos para la opción de gobierno y cambiar leyes a
su antojo.
Conclusiones.
El número de votantes de este país son los que son. Los votantes en su mayoría
son de izquierda o de derecha, y hay que repartirlos entre las opciones
existentes, cosa a lo que no estaba acostumbrado el PP, y esta ha sido una
causa de su fracaso. Cuando el PSOE obtiene grandes resultados, el resto de los
partidos de la izquierda se hunde. Cuando la abstención es alta, la izquierda
obtiene peores resultados ya que es más autocrítica y se abstiene con suma
facilidad. Por último, hay un grupo un tanto amorfo que va hacia donde sopla el
viento, no le gustan los discursos extremos, y muchas veces deciden los
resultados. Otro error, a mi juicio, del PP que radicalizó su discurso buscando
evitar fugas hacia Vox.
¿Son
acertadas estas conclusiones? Ahora toca aplicar las opciones que describí, ya
que, lógicamente, las mías son muy subjetivas.
Coincido totalmente con tu análisis. No puedo añadir ni una coma.
ResponderEliminarMuchas gracias por pasar y comentar.
EliminarHe procurado ser lo más aséptico posible. Es posible que en algún pinto haya mostrado mi "pata roja", pero la tengo y no voy a renegar de ella ¿no?