sábado, 16 de julio de 2022
viernes, 8 de julio de 2022
Ucrania
Debo reconocer que
uno de los oficios que nunca hubiera
podido ejercer dignamente es el de “tertuliano de debates televisivos”. Existen
infinidad de materias que desconozco, o tengo muy someros conocimientos sobre
ellas. Al contrario de los que ejercen dicho cometido, que poseen conocimientos
enciclopédicos sobre cualquier tema que se trate, y pueden opinar dogmáticamente
sea cual sea el tema del debate.
Hasta fechas muy
recientes, aparte de que la ribera del Mar Caspio era un destino turístico para
rusos y resto de los naturales de esa parte del mundo, por la bonanza de su
climatología en contraste con la de las zonas aledañas, poco sabía de esa zona
del mundo.
A raíz de un
anuncio sobre un crucero turístico por sus costas, cuyo atractivo principal era
que a bordo iría una orquesta sinfónica que ofrecería conciertos todas las
veladas, indagué un poco, encontrando, casi exclusivamente, recetas de pollo al
estilo Kiev. Entre el precio prohibitivo del viaje, y el episodio de la
ocupación de la península de Crimea por parte rusa, y la tensión que originó,
desistí del viaje.
Este era
prácticamente mi nivel de cocimientos acerca de ese país. Salvo un par de situaciones
que presentan una ligera relación con Ucrania.
Uno muy tangencial:
durante unas cuantas semanas, un par de residentes o naturales del país
estuvieron siguiendo este blog, y, al igual que empezaron a seguirlo, dejaron
de hacerlo.
La otra fue más
personal, pues tuve unos alumnos ucranianos en uno de los cursos que impartí de
“Español para emigrantes”, y con uno de ellos mantengo relaciones epistolares
esporádicas.
Como se puede ver,
es muy poco bagaje para tomar claramente partido por esa nación. Tanto más
cuando he visitado Rusia, he leído a sus clásicos, conozco su música y amo su
ballet. Además, soy capaz de entender algo (muy poco) escritos en ruso.
Con estos
antecedentes, y el escrito en este mismo blog de la pasada semana sobre mi
postura personal con referencia a la violencia en general, a primera vista
cabría esperar una ligera inclinación hacia las tesis rusas, o una tibia
equidistancia. Nada más lejos de la realidad.
Si hay algo que no
soporto, y que me subleva, son las actitudes chulescas de los matones de
discoteca poligonera. Putin, al igual que ellos, no duda en agredir cuando se
sabe en superioridad numérica o circunstancial. Utilizan armas contra los
indefensos, ya sea (según el caso) cuchillos, porras o puños americanos, o
misiles cañones y tanques. Todo les vale para intentar que prevalezca su tiránica
vesania.
Hay una frase muy
comentada y real que dice: “En una guerra, la primera víctima es la verdad”.
Por esta razón, y por mis limitaciones de acceso a fuentes fidedignas y
contrastadas, no sé si alguna de las cuestiones alegadas por el Dictador ruso
tiene alguna base real, pero, incluso en el hipotético caso de que así fuese, el
uso de la fuerza, la invasión de un Estado soberano, y, sobre todo, el ataque
indiscriminado a la población civil le quita toda credibilidad y legitimidad a
sus palabras y actos.
Retomando su matonismo,
el problema para la humanidad es que, si se siente frustrado en su egolatría,
puede recordar que tiene un bien surtido arsenal nuclear a su disposición.
viernes, 1 de julio de 2022
¿Qué está pasando?
Vaya por delante
que soy de las personas que se saltan sin ojear, las páginas de sucesos, que
filtro las noticias con dosis de violencia e incluso no veo los noticiarios
televisivos a las horas de las comidas.
A pesar de todas
mis precauciones no puedo evitar totalmente, que este tipo de noticias lleguen
hasta mí, más o menos atenuadas.
Las portadas de los
periódicos, los avances informativos, los sueltos que se cuelan en los móviles
y toda la profusión de medios empeñados
en mostrarnos los hechos más truculentos que acaecen en esta, nuestra sociedad.
Las palizas, las
reyertas y la violencia en las calles están cada día más presente,
desgraciadamente, entre nosotros.
Tenemos la
impresión generalizada, o al menos la tengo yo, que estas situaciones ocurren a
los otros, a los que practican conductas de riesgo y sobre todo que están magnificados
por los intereses mediáticos para aumentar las ventas
No obstante la
violencia existe. Por mucho que la intentes ignorar. Un día, un mal día, te
explota, aunque sea tangencialmente, delante de tus narices, en plena cara...
El domingo por la
tarde murió un joven, hijo de una persona que conozco. Su única culpa fue encontrarse
en el sitio equivocado en el momento inadecuado. Al salir de su trabajo la
noche de S. Juan fue a una discoteca. Salió un momento al exterior y en ese
momento y sin mediar ninguna causa, según la declaración de los testigos, se le
acercó un bípedo que le empujo violentamente y a raíz de ese empujón cayó al
suelo. Circunstancia que aprovechó el agresor para darle una patada en el
cuello y salir huyendo.
¿Qué nos pasa?,
¿Qué hace alguien sin mediar provocación ataque de forma tan violenta a un
semejante? ¿Qué pasará por la mente de quién asesta un golpe necesariamente
mortal?
Este tipo de hechos
me llevan a reflexionar si no estaremos en un proceso de realimentación de
conductas violentas y agresivas, fomentada desde los poderes públicos y en un
plano mundial.
La violencia
verbal, la crispación e incluso el odio que trasciende de muchas, demasiadas,
intervenciones de los representantes políticos ¿No será una caja de resonancia que
amplifique las malas pasiones que estamos viviendo a píe de calle y que
dificulta la normal relación, entre los ciudadanos?
No podemos descartar
el enfoque contrario: La violencia larvada, el odio irracional, la frustración
ante un futuro incierto, la cultura de “todo nos es debido” fomenta una
agresividad exacerbada en la sociedad que se transmite a la vida política, que
otorga un plus a los grupos o formaciones que se alinéame con la violencia.
¿Estamos inmersos
en una “moda” en la que se confunde agresividad con triunfo social? ¿O hemos
entrado en un periodo de violencia como han existido en tiempos no demasiado
lejanos?
Tampoco descarto el
tener la sensibilidad sobre el tema muy a flor de piel, por conocer a la
familia de la víctima y esté llevando a la generalización casos aislados.
El transcurrir del
tiempo, situará el suceso en su magnitud exacta
viernes, 24 de junio de 2022
Atlas
En el momento de
iniciar este escrito, no sé si servirá como un reinicio regular del blog, si será
un acto esporádico, o, ni tan siquiera, si lo finalizaré de escribir.
Tampoco tengo claro
si el cansancio que provocó que dejara de escribir prevalecerá sobre la
indignación que siento por la actitud de la Izquierda, en especial de la
andaluza, aunque no eximo a la restante del Estado.
No soy ni tan
egocéntrico, ni tan ingenuo como para llegar a creer que expresar mi opinión desde Internet vaya a cambiar algo
la situación, o pueda tener alguna utilidad práctica. Simplemente, es un
pataleo mental para ahuyentar mi frustración.
En primer lugar, y
ya pasando al análisis de los resultados, creo que se debe destacar que el PP
ha hecho un uso inmejorable de la ineptitud de la Izquierda, ha considerado, y
los resultados le han dado la razón, que sus oponentes ya saben crisparse solos
y sin ayudas. Por tanto, se han limitado a sonreír y a poner cara de
gestores competentes. Y, cuando les ha convenido agitar el caso de los ERE’s,
han utilizado a foráneos para no perder la cara de dialogantes y buenos chicos.
¿Mientras tanto.
qué ha hecho la Izquierda? Si queremos resumir, podríamos decir: Bien nada.
Pero como puede
parecer demasiado categórico y axiomático voy a expandirme un poco dividir en
dos grandes grupos a esa hipotética Izquierda
Empecemos por el
PSOE, que, en vez de hacer oposición, se ha pasado la legislatura lamiéndose
las heridas por la pérdida del Poder atesorado durante casi cuatro décadas. Como
resulta natural en los partidos de izquierda y similares, en vez de afianzar
estructuras, consolidar un cuerpo dirigente, y, sobre todo, hacer una oposición
responsable, se han dedicado, como no podía ser de otro modo, a buscar un
refugio confortable, y a esperar a ver si sucedía el milagro.
Del resto de la
izquierda o más bien de las izquierdas ¿Qué se puede esperar de una gente tan
incapaz e inepta que, en vez de buscar una alternativa para los ciudadanos, se
dedica a pelearse entre ellos para lograr una situación preponderante?, ¿Cómo se puede confiar en una
gente que es incapaz de presentar su
candidatura en fecha y hora?
La situación, digna
de la Marina de Pancho Villa, ha llevado a una situación que, en mi opinión, es
inconcebible e inaceptable: La izquierda no ha hecho ningún tipo de
autocrítica. No ha cometido errores. El
PP puso una fecha con un clima caluroso para que la gente no fuese a votar.
Sin embargo, lo más
enervante es la satisfacción que muestran porque VOX no haya entrado en el
Gobierno andaluz.
Circunstancia, no olvidemos, que en ningún momento hasta que
los resultados fueron concluyentes nunca descartaron en el PP
viernes, 21 de enero de 2022
Bolero
Creo no equivocarme
si afirmo que todo el mundo conoce y reconoce el Bolero de Maurice Ravel.
También que un gran número de personas a las que no les gusta la música mal
llamada clásica encuentra agradable, e, incluso, manifiesta que le gusta esta
obra.
¿Cuál es el secreto
de esta aceptación generalizada? Su estructura, consistente en un tema corto,
sencillo, brillante, y fácilmente identificable, que, con variaciones de
instrumentación, se repite hasta la saciedad.
Sin pretender
compararme en cuanto a sus cualidades con el celebérrimo Bolero, encuentro que en mis escritos, amparado en un estilo más o
menos logrado, un vocabulario escogido con sumo cuidado, y una cuidada
gramática, he estado durante mucho tiempo diciendo lo mismo. Cambiando la
“orquestación”, pero interpretando siempre el mismo tema.
Con anterioridad a
estos días festivos, me encontraba cansado. Ahora, y tras esta interrupción y
al releer alguno de mis escritos, he visto la razón: mi contumaz repetición del
mismo tema.
No cierro el blog
con estos casi 500 artículos que he publicado. Creo que alguna vez he tenido
razón, que algunos han gustado, que otros han hecho pensar sobre lo expuesto,
otros han podido indignar, otros, los más en los últimos tiempos, aburrir o, lo
que es peor para mi ego, no interesar y ser ignorados.
Simplemente lo dejo
en suspenso por tiempo ilimitado. Si un día siento que puedo aportar algo nuevo,
o noto la necesidad de compartir de nuevo mis reflexiones, volvería a retomar
el blog.
Muchas gracias a todos, especialmente a los que me han leído en alguna ocasión.
martes, 21 de diciembre de 2021
Felices fiestas
Todas las
religiones que han prosperado a lo largo de la historia de la humanidad han
tenido, al menos, dos claves en común:
En primer lugar,
una fructífera relación simbiótica con el poder temporal. En la actualidad es
clara y directa esta relación en muchos países islámicos, y, aunque de manera
menos visible, también en países de tradición cristiana, pues se forman lobbies
capaces de influir en las elecciones presidenciales, o la aprobación de las
leyes.
La otra
característica es el afán de cubrir y solapar los nichos que ocupaba la
religión a la que sustituyen, no solo en el marco de espacios materiales, también
de los espirituales, y celebraciones.
Los templos
etruscos fueron reconvertidos en romanos, y estos, a su vez, en cristianos, y,
por no ser menos, muchos de estos en mezquitas.
Vayamos ahora al
tema de creencias y celebraciones. No creo que pueda caber duda de que el
cristianismo sea una religión de origen semita continua, hasta el punto que
algunos autores consideran al cristianismo como una secta herética del
judaísmo; en tanto que otros consideran que el cristianismo es el camino
verdadero al ser Jesús el Mesías anunciado. No voy en ese camino. La Madre de
Jesús ¿Cuándo alcanza la relevancia dentro de las creencias cristianas?, ¿Cuándo
se populariza esta religión entre los pueblos no semíticos acostumbrado a
adorar a diosas? La incidencia en los Evangelios de la madre de Jesús es
prácticamente nula. De los cuatro evangelistas, solo, y de pasada, la cita Juan
en el momento de la crucifixión. Los otros tres la ignoran.
Estamos en tiempos
navideños, y aquí tenemos un ejemplo de superposición. En la zona de Belén, coincidiendo
con el solsticio de invierno, las noches son frías. Por lo tanto, no resulta
pausible que los pastores durmieran al raso con sus rebaños, por lo que se puede
descartar que Jesús naciera en estas fechas. El solsticio de invierno se celebraba
desde los albores de la humanidad, Hacía frío y se recogían en comunidad.
Además, sabían, y les llenaba de gozo, que las tinieblas nocturnas no avanzaban
más, y que la luz del sol se iría prolongando. Y este motivo de celebración de
origen pagano se prolongó a lo largo de los siglos. Al no poderse suprimir la
fiesta, el cristianismo la cubrió con la conmemoración del Nacimiento de Jesús.
Seas creyente o no.
Celebres la Navidad, el solsticio de invierno, o el hecho de estar vivo, te
deseo a ti y a los tuyos unas felices fiestas.
viernes, 10 de diciembre de 2021
¿Qué menos?
Hace ya bastante tiempo comenté que una de las
ventajas de no tener ningún tipo de ligaduras era la libertad al elegir el tema, y darle el tratamiento que,
según mi parecer, era el más adecuado para el ese tema.
Hoy es una de las veces que voy a usar de esa
libertad, y a algunos de los lectores puede parecerles que me salto el guion, que,
en contra de la línea argumental que he ido siguiendo, esta semana no hablo de
política.
Por una parte, tienen razón pues no hablaré de los temas políticos
que son habituales en mis escritos. Pero también se equivocan: si consideramos
la política en su el más amplio sentido de la palabra, la Cultura es una
parte de la política, ya que es una parte de la relación de los seres humanos,
o, al menos, yo lo considero así.
En otros lugares del planeta no se menosprecia a los
artistas que se expresan con vehículos menos convencionales. En nuestro país, no
tiene el mismo reconocimiento oficial un cineasta, que un dramaturgo o un
fotógrafo, o que un pintor, y podría citar infinidad de ejemplos más.
Me he referido a otros lugares ya que Bob Dylan
recibió de forma muy merecida el reconocimiento de la Academia sueca, que le
concedió el Premio Nobel de Literatura por su poesía, poesía que mostró en
canciones en vez de en las formas tradicionales.
En estos días Joan Manel Serrat ha anunciado su
despedida musical, y sólo ha encontrado eco en sus seguidores. La Cultura
oficial y los intelectuales orgánicos no han hecho ningún movimiento ni
declaración.
Muchos, especialmente si desconocen el panorama
cultural español, pueden pensar: “Todos los días se retira o retiran un
cantante y no pasa nada”.
Joan Manel Serrat no solo es un cantante: Es un
poeta y amante de la poesía. Fue la voz que hizo escuchar en el plúmbeo yermo
del tardo franquismo a poetas perseguidos, forzados a marchar al destierro, e,
incluso, asesinados por la tiránica dictadura que esclavizó a la ciudadanía
¿Quién, aun sin saber quién era el autor de la letra, no ha tarareado
“Caminante no hay camino…” o “Para la Libertad traigo…”?
Siendo importante esta faceta divulgadora de esa
riqueza literaria que nos tenían secuestrada, no podemos obviar que Serrat era (y es) un extraordinario poeta
que ha elegido la música como vía para acercar la poesía al gran público.
Aprovecha, además, su bilingüismo para escribir en
sus dos leguas, en ambas con igual fluidez y sentimiento.
“Cançó de bressol” es una bella canción de cuna que
sigue la tradición de aunar un texto inquietante y trágico propio de las nanas tradicionales.
Su poesía abarca multitud de géneros, desde
costumbristas, como “Fiesta” o “La tieta”, o el bello poema de amor y
melancolía “Paraules d’amor”, o la pujanza y fuerza de “Ara que tinc vint anys”.
Pero, quizás, donde más se puede ver la calidad de su poesía es en sus cantos a
las cosas pequeñas, y aparentemente inanes como “Cada loco con su tema”, o “No
hago otra cosa que pensar en ti”.
Por su puesto, no se puede olvidar “Mediterráneo”,
compendio de la idiosincrasia de los pueblos ribereños de este mar.
Sin embargo, no se le ha reconocido de forma
oficial. Todo lo contrario.
Los nacionalistas catalanes no le han perdonado que
escriba en castellano. Los nacionalistas centralistas que empezara cantando y
escribiendo en catalán. La derecha sus críticas al franquismo, y las izquierdas
su apoyo crítico al socialismo catalán.
¿A qué se espera para reconocer oficialmente su
extraordinaria obra? ¿A que se muera?
Como dije en mis escritos de las últimas semanas, estoy cansado. Por ese motivo me tomo unas vacaciones hasta pasadas las fiestas.