Pasión por el cine

Se acusa frecuentemente al Gobierno del PP que es enemigo de la cultura por sus ajustes,  la brutal subida del IVA, el recorte de subvenciones y una serie de medidas que aparentemente van en esa dirección.

Pero aparte de esas “pequeñas anécdotas”, no podemos obviar el constante ejercicio de homenaje al cine que realizan en sus manifestaciones públicas. Es más estoy convencido que muchos de ellos hubiesen podido dar páginas gloriosas al séptimo arte. Vayamos con algunos ejemplos:

¿No es acaso un sentido homenaje al  fallecido actor Antonio Ozores el magnífico monologo  del Ministro Sr Montoro, explicando el error de la Agencia tributaria en la atribución de los bienes de la Infanta? Se pasó sus buenos minutos tratando de explicarlo, repitiendo en su exposición la palabra error casi en 40 ocasiones y al igual que en los diálogos del Sr. Ozores, nadie entendió nada, quizás para redondearlo le faltó decir: “¡No hijo, no!”.

¿Y cómo no deleitarse  el ánimo con la Ministra Sra. Mato emulando a Vivian Leigh en su papel de  Escarlata O’Hara?  cuando afirmaba: “¡A Dios pongo por testigo que nunca vi un Jaguar en mi garaje!”

Y no digamos de la Sra. Cospedal en plan Marxista (de D. Groucho)  en el remake de: “La parte contratante de la primera parte… “al justificar el finiquito en  diferido al Sr. Bárcenas”. Fue una actuación de Oscar.

No terminan ahí los homenajes, la actuación del Sr. Aznar anunciando su posible regreso a la política activa por el bien de España, hace palidecer la interpretación del gran Chaplin en su  secuencia con el globo terráqueo en El Gran Dictador.

Pero que nadie se crea que solo este amor al cine se da entre los dirigentes nacionales, nuestro President Juanrá l “el Engominao”  con su. “sabemos lo que tenemos que hacer  y haremos lo que tenemos que hacer…”  hace que  Pepe Isbert en su discurso como alcalde de la película “Bienvenido Mr. Marshall” quede como un aficionado.  Es una lástima que el Sr. Berlanga haya fallecido, pues estaría tras él proponiéndole como protagonista en alguna de sus películas.

Pero en el PP, no son egoístas, no quieren tener todo el protagonismo,  quieren que todos (excepto los banqueros), asumamos el rol  de Charlot, cuando acuciado por el hambre se comía su bota.

 

Publicado en El Periscopi el 28 06 2013