viernes, 28 de septiembre de 2018

Ética no es una región griega




Hay algunas cuestiones que, a pesar de la experiencia, más o menos aprovechada, que tengo en temas políticos, aún me sorprenden.

Quizás, la que me causa mayor confusión, y, por qué no decirlo, indignación, es la concepción tan sui generis que tienen muchos de los que conforman la clase política del tema de la ética, y su forma de entenderla. Aunque, para ser sincero, a veces me pregunto: ¿No tendré yo un sentido trasnochado de ella?

Se critica al gobierno del Sr. Sánchez porque, por ahora, han dimitido dos ministros en sus cien primeros días. Entonces, si les han atrapado en actuaciones irregulares, ¿Qué tenía que haber hecho el Presidente?

Al Presidente se le puede criticar por su falta de inquirir más en la vida, y, por actuaciones anteriores a su nombramiento, de confiado, o, incluso, de inocente, ya puestos. Pero el hacerles dimitir es la única actuación correcta posible, y, añadiría, que imprescindible, que se puede y se debe exigir a cualquier dirigente en cualquier ámbito si su personal de confianza resulta que no es digna de ella, y, que conste que no hablo de responsabilidades legales y o penales. Tampoco  hablo de que se podría pedir la dimisión de quien nombró a esas personas. No olvidemos la composición del gabinete de Aznar, al que algunos consideran un héroe, y el mayor activo personal del partido.

Y, ya puestos hablar de ética, ¿En qué lugar dejamos a los que fueron propuestos, y aceptaron ser ministros sabiendo “los muertos que guardaban en sus armarios”? La ingeniería fiscal puede, en algunos casos, no ser delito. Pero ¿Es la persona que la ha hecho la más conveniente para defender los intereses de los ciudadanos? O, en el tema de los currículos hinchados ¿Es peor si lo hace el del partido contrario?

Ahora se pide la cabeza, quizás con toda la razón, de la Ministra de Justicia por haberse reunido con el ex comisario Villarejo. Entonces mi pregunta es ¿Habrá suficientes cestas en este país para contener las cabezas de todos los que se han reunido con el citado ex comisario?, ¿No fue el anterior ministro de Interior el que, supuestamente, le encargó la formación de una “Policía Patriótica” para espiar a los políticos nacionalistas catalanes, y a los rojos pro venezolanos de Podemos? Todo ello, por supuesto, al margen de cualquier supervisión judicial, y, por lo tanto, de forma completamente ilegal.

¿Y no se ha revelado que, al menos, una vez el actual líder del PP, el Sr. Casado, se entrevistó con el citado excomisario? Pero dejemos, de momento a, si les parece bien, el comentario sobre la forma de ver la ética el Sr. Casado para otra semana.

Para evitar confusiones lingüísticas entre  la región y el tema que nos ocupa, me permito remitirme al D.R.A.E que describe, especialmente en sus cinco primeras acepciones, la definición de la región griega Ática, y para que quede aún más claro,  vean la definición de ética.

viernes, 21 de septiembre de 2018

Coincidencias parciales

 


Se colocan implantes de pecho, de nalgas, o de cabello. Se realizan  liposucciones, rinoplastias, y diversas operaciones más. Unas veces se realizan para compensar alguna cuestión genética, otras para evitar inseguridades, no olvidando que algunas vienen dadas por cuestiones laborales, y, por último, por razones puramente estéticas.

¿Entonces, la cirugía plástica o reparadora la podemos considerar una frivolidad o una necesidad? Aquí es cuando aparece el problema, pues tendemos a juzgar, sin meternos en los zapatos de quién se realiza la intervención, y obviamos sus razones íntimas y personales.

Pero, no piensen que me he equivocado, y transformo mis escritos, tras las dudas que me surgieron sobre su continuidad, en una crónica rosa donde vaya a justificar las operaciones de los famosos, famosillos, o de los que lo intentan. Este inicio simplemente era para establecer un precedente sobre la mejora de la apariencia, tanto en el plano del físico como en el formativo.

Al igual que los senos se aumentan con silicona, los currículos se  aumentan con una Carrera, un Máster, o un Doctorado. En ambos casos, el valor es el mismo, simple cuestión de imagen, sin valor orgánico, pero que sirve para dar una apariencia más atractiva a la persona que utiliza estos añadidos.

También en ambos casos, si el “aumentado” se percata de que se ha excedido, siempre puede volverse atrás, sustituyendo el implante por uno menor, o haciendo desaparecer de su currículum algún Máster o Doctorado que se había puesto de más.

Pero siguen las coincidencias, en muchas peluquerías o centros de belleza algunas personas inyectan botox, o realizan algún tipo de actuación sin tener la titulación, o sin disponer de las instalaciones adecuada para hacerlo. Con los Másters ocurre exactamente lo mismo: existen los Universitarios, regulados y amparados por la Universidad, que, realizados correctamente, tienen valor legal; y existen otros que, a efectos prácticos y legales, no valen ni el papel en el que están expedidos, pero que pueden engañar a quienes precisamente se busca engañar.

Pero no todo son similitudes, mientras la falsa apariencia después de una intervención, a pesar de que pueda engañar a un espectador, no es ningún delito; la falsificación de un currículum en un documento público sí que puede ser un delito según las circunstancias que concurran.

.Aún ya fuera de las similitudes, no deja de llamarme la atención que todo el mundo habla de doctorados, doctorandos, tesis, tesinas, y trabajos de fin de máster, cuando creo que son muy pocos los que conocen el significado de esas palabras, y cuáles son las diferencias entre ellas. Por ende, mucho menos cómo incidió el Plan Bolonia en las titulaciones. Y no hablemos de las diferencias entre plagio y citas.

También me llama la atención, y mucho, que personas teóricamente expertas en leyes quieran hacer recaer el peso de la prueba en el acusado, cuando la buena praxis es que el peso de la prueba lo tiene que aportar el acusador. Esto es lo que está sucediendo con el doctorado del Sr. Sánchez, a quien han acusado de diferentes actos relacionados con su tesis, desde que no la había realizado y defendido, hasta que es un plagio, o ha sido escrita por un “negro”, sin presentar ninguna prueba, y exigiendo que él demostrará su inocencia. Se tiene que ser muy ignorante, o tener muy mala fe para posicionarse en esa actitud.

viernes, 14 de septiembre de 2018

¡Defenderla!



La Patria está en peligro ¡Hay que defenderla!

Algunos me preguntarán ¿De qué peligro me habla? A esos les ruego que no me hagan preguntas que me resulta imposible contestar puesto que soy solo un mero transmisor de un clamor. Además, solo podría contestar con una respuesta que parecería una falta de cortesía, pues lo único que podría decir es: “¿Y yo qué sé?, pregúntenlo a quienes lo pregonan.

De todas formas, el grito alarmista no viene solo por las consecuencias de la Diada, que también, viene ya de muchos años de catastrofismos anunciados, de apocalipsis varias, y de aquellos que agitan los sentimientos primarios en vez de fomentar la reflexión.

Por lo que he podido sacar en conclusión, después de escuchar varias versiones, las causas del peligro y por las que estamos obligados a defenderla son las siguientes:

a)    De su ruptura, que nutrida por los pérfidos socialistas, que para mantenerse en el poder de manera ilegal, como afirman todos los voceros de la ultra derecha, no dudan en aliarse con los separatistas y los comunistas-populistas.

b)    De los patriotas, que no dudan en agitar sus banderas ornitólogas mientras mantienen sus capitales en paraísos fiscales, haciendo bueno el dicho: “La patria está en el corazón, pero el dinero en…”.

c)    De la competencia entre los partidos de derecha: PP y C’s, que en su afán por ganarse al electorado de Vox, no tienen ningún reparo en establecer una competición para ver quién es más defensor de la “PATRIA”, abandonando a sus electores centristas, y abriendo aún más la brecha con y en Catalunya con sus torpes interesadas, y torticeras políticas.

d)    De los “dialogantes” muchachos amigos del deporte rey estadounidense, el base ball, que no dudan en utilizar convincentes razones para convencer a los que no sienten (no me sale lo de piensan) como ellos.

e)    De los del: “Espanya ens roba”, obviando que las grandes empresas catalanas salieron disparadas a raíz de 1 O, y, de ellas, hasta la fecha, solo ha vuelto una.

f)     De Convergencia y de su dirección, pues, a pesar de su nuevo vestido de “pubilla”, es el partido del “caso Palau”, del caso ITV”, del 3%, de las fortunas de los Pujol, y , gracias al Procés, nadie se acuerda de ellos.

g)    De los de la República de Catalunya a pesar de todo, que, de forma unilateral sin explicar, y creo que sin explicarse, qué repercusiones internacionales tendría esa ruptura no pactada y sus consecuencias en el interior. Gran Bretaña está intentando por todos los medios que su Brexit sea pactado, y está temerosa de las consecuencias si no lo hacen así ¿No se tendría que aprender algo de ese ejemplo?

A pesar de mi encabezado, no estoy muy convencido de ello, ya que tras la lectura de estos dos titulares en el diario Ultima Hora de Palma con fecha de  12-09-2018: "Más de la mitad de jóvenes no alcanzará el nivel educativo de sus padres", y "Chavelita Pantoja se suma a "Gran Hermano VIP" por el módico precio de 20.000 euros cada semana”, empiezo a dudar que se deba salvar.

 

viernes, 7 de septiembre de 2018

Franco ese…




Que a estas alturas del siglo 21, y tras casi cuarenta y tres años desde su muerte, haya franquistas se puede entender. El cerebro humano tiene aún vestigios de los dinosaurios, que hacen que ese llamémosle pensamiento sea posible. También quedan por ahí defensores de Hitler, de Stalin, y de otros dictadores, y aceptamos su existencia.

Lo que resultaría insólito en un país razonablemente serio, y que se auto clasificase como demócrata, es que esos fanáticos seguidores de genocidas pudiesen tener privilegios grupales.

¿Por defender la memoria de las atrocidades de Videla, intentando con mis mentiras que la gente crea que fue un General defensor de la Patria, qué bonificación me pagan?, ¿Si alguien llama asesino a Pinochet, puedo demandarle?, ¿Con cuánto contribuye el gobierno alemán para mantener un monumento a la mayor honra de mi admirado Hitler, y que fue construido con prisioneros en régimen de esclavitud?, ¿Verdad que suena absurdo?, ¿Verdad que resulta inverosímil? Cambiamos esos apellidos citados por el de Franco y miremos lo que resulta:

La Fundación Francisco Franco, legal actualmente, y con desgravaciones fiscales para los que ayudan a su financiación, va a presentar (o quizás la haya presentado ya) una demanda contra Wyoming por parodiar en su programa la exhumación del cadáver del dictador, y, lo que es peor, algún juez habrá seguro que admitirá la querella.

La Familia de Franco, amenaza al Gobierno con otra querella por prevaricación, mientras incumplen la sentencia sobre las visitas al Pazo de Meirás.

Y desde mi ingenuidad me pregunto. ¿No va siendo hora de que se aplique la Ley de memoria Histórica, y se ilegalice la terrible arbitrariedad de mantener vigente una fundación para exaltar la memoria del dictador responsable de tantos asesinatos y tropelías?

¿No va siendo hora de que Hacienda investigue las cuentas de la familia Franco?

¿No va siendo hora de que el siniestro lugar llamado “Valle de los Caídos” deje de ser el panegírico del genocida?

¿No va siendo hora de que el Ministerio de Defensa finalice la investigación a los militares en activo que firmaron el manifiesto contra la exhumación, al tiempo que exaltaban su figura?

¿No va siendo hora de que España se transforme, al menos en apariencia, en un país normal?

Hay muchísimas más preguntas, pero...

viernes, 31 de agosto de 2018

¿Dónde me pierdo?




En matemáticas el centro es un punto, por tanto, es intangible. Sin embargo, en política es un espacio más o menos disperso, con una cierta amplitud hacia la derecha o la izquierda. Los que se manifiestan de esa posición suelen ser personas con poca formación política, y, por tanto, carentes de ideología, y con poco sentido analítico.  No pretendo que esta opinión, que, como todas las genéricas, resulta cuestionable, sea una verdad indiscutible, es solo mi impresión personal.

Lo que sí que resulta incuestionable, a través de nuestra breve historia después de la muerte del Dictador, es que el partido que ha logrado proyectarse con mayor fortuna en ese hipotético centro y la aceptación  de sus mensajes por parte  ese electorado es el que ha triunfado en las urnas.

Todos los partidos que han gobernado en España han proclamado: “Nosotros somos el centro, y gobernaremos para ese centro”. No importaba si ese mensaje era real o no, lo importante era decirlo con un poder de persuasión para que convenciese a la gente a la que iba dirigido.

Inexplicablemente, al menos para mí, los partidos que se proclaman de centro, más o menos escorados a la derecha, parece que se hayan decidido a renunciar  su imagen centrista para radicalizar su postura y disputarse los votos de la derecha más conservadoras del país. Me da la impresión de que buscan con más ahínco los votos de Vox que los de ese tan citado centro.

¿En qué me baso para hacer estas afirmaciones? Pongamos solo para no agobiar, dos cuestiones:

a)      Migraciones: Tanto el PP de Casado  como el C’s de Rivera mantienen un discurso sobre este tema fácilmente comparable con los partidos xenófobos, y de extrema derecha europea como la Liga Norte italiana de Matteo  Salvini, o como la del Frente Nacional francés de Marie le Pen. Leyendo los argumentos  de cualquiera de ellos resulta imposible adivinar a quién de esos personajes o esos partidos se pueden atribuir. Las dos formaciones mantienen posiciones completamente alejadas en este asunto a los de sus supuestos correligionarios Merkel o Macron

b)      Catalunya: Parece como si los dos partidos del teórico centro-derecha española rivalizaran para ver quién de los dos es más intransigente y menos proclive a llegar a un acuerdo. La cerrilidad de judicializar el tema, evitando cualquier asomo de dialogo político, ha llevado a una posición de enfrentamiento y al cierre de cualquier puerta de entendimiento. El llamamiento a boicots, las represalias, y todas las actuaciones tendentes a evitar un Catexit se han llevado de tal forma que tanto el PP como C’s se han convertido en una fábrica de producción masiva de independentistas. Esa radicalidad está, al menos aparentemente, fuera de lo que por su posición, en teoría alejada de los extremos, debería ser la más proclive a llega a encontrar soluciones. Por otra parte, no olvidemos que en la parte opuesta está liderando la posición un partido también supuestamente centrista que está instalado en una posición de intransigencia total.

¿Tantos votos da la xenofobia como para despreciar la declaración los Derechos Humanos?

¿Tantos votos dan el empecinamiento y la sinrazón a los dos bandos enfrentados?


viernes, 24 de agosto de 2018

De acuerdo, pero… (2)



El Sr. Biel Company, presidente del PP de les Illes Balears, a raíz de la propuesta de Unidos Podemos de subir impuestos a “los que más tienen”, muestra sus reticencias en unas declaraciones en las que afirma: “la subida de impuestos está en el ADN de la izquierda”, y muestra, además, su “preocupación ante posibles despilfarros”. Y, quién lo iba a decir, estoy de acuerdo con sus palabras, aunque me temo que nuestras valoraciones sobre esa hipotética subida de los impuestos son muy distintas.

En primer lugar, mi reticencia no es por la subida en sí, es más bien por sus escasas posibilidades de llegar a buen fin. Por una parte, porque la iniciativa, ha partido de Unidos Podemos, y es bien notoria la renuencia de aceptar, por parte del Sr. Sánchez,  cualquier iniciativa surgida del grupo morado. Por otra parte, una medida de ese tipo tiene un componente ideológico de izquierdas que dudo pueda ser aceptado por una parte importante del P(SO)E.

También estoy de acuerdo en que los impuestos están en el ADN de la izquierda. Unos impuestos directos, progresivos, y proporcionales a la renta percibida son básicos para la distribución de la riqueza, y para fomentar un “Estado de Bienestar”. Pero no creo que esa distribución de la riqueza y ese fomento de los beneficios sociales entren dentro de los objetivos de los neoliberales que ahora priman en casi todas las corrientes ideológicas. Corriente de opinión que, no por casualidad, comparte, al menos de momento, el Presidente autonómico del PP.

Me uno a su preocupación por el despilfarro, y también lo rechazo. A pesar de que el D.R.E. hace una descripción muy precisa, como se puede comprobar aquí, vuelvo a pensar que no coincidimos en los conceptos. Para mí, son despilfarros: las obras faraónicas sin ninguna utilidad pública, y que solo sirven para justificar las comisiones, o el egocentrismo de su impulsor, o ambas cosas al mismo tiempo. Por poner unos pocos ejemplos, ya que podría citar multitud: el ascensor a ninguna parte en el Velódromo de Palma,  la maqueta de coste millonario para un Teatro de la Ópera en esta misma ciudad, los aeropuertos sin tráfico de Castellón o Ciudad Real, o la Ciudad de la Justicia de Madrid. O, en otro orden de medidas, la construcción  de autopistas inviables y su rescate posterior, dejar que prescriban las deudas de los bancos  que fueron rescatados con dinero público o…

Sin embargo, la distribución de la riqueza no es, en mi opinión, un despilfarro, es una forma de hacer una sociedad más justa. El aumento de los salarios y de las pensiones no es un despilfarro, antes bien es una posibilidad de aumentar la riqueza, al fomentar el consumo, lo que, a su vez, fomenta la producción de forma que  la espiral se auto alimenta. No es una idea trasnochada de un izquierdista, es la base en que se fundamentó John Maynard Keynes, que tanto contribuyó a evitar un  nuevo crack económico al acabar la producción masiva de armamento al finalizar la II Guerra Mundial.

Pero esas teorías no están caducas como nos han intentado hacer creer los apóstoles del neo liberalismo. Las teorías Keynesianas, con los ajustes necesarias, debido a lo cambiante de la sociedad y a las nuevas tecnologías y a los nuevos sistemas de producción, han sido aplicadas en Portugal, que padeció la crisis aún de forma más virulenta que España, ya que a ellos se les tuvo que hacer un rescate de la economía nacional, y a nosotros solo del sistema financiero.

Hoy ambas naciones han salido oficialmente de la crisis, pero en nuestro país la brecha salarial, los recortes sociales, y la precariedad se han ahondado. Mientras que en Portugal han conseguido una sociedad más igualitaria.

No voy a insultar a la inteligencia y por eso no preguntaré ¿Qué ventaja tiene el sistema neoliberal y su reducción de impuestos? ¿A quién beneficia esa política económica?


viernes, 17 de agosto de 2018

De acuerdo, pero…




Leo que Unidos Podemos, propone un aumento de impuestos a “los  que más tienen” para apoyar el objetivo del déficit. Nada que objetar, pero los que “más tienen”,  no creo que estén por la labor, ya que si tienen más, es por la sencilla razón, entre otras cosas, que son los que menos contribuyen a la hacienda del país. 

No quiero ser demagógico, pero ¿Algún profesor de E.G.B. o auxiliar administrativo de la Administración ha salido en los llamados “papeles de Panamá”? ¿Cuántos protésicos dentales se aprovecharon de la amnistía fiscal del Sr. Montoro? ¿Cuántas telefonistas tienen cuentas en Suiza? ¿Cuántos bomberos tienen una S.I.C.A.V? Estos métodos y lugares citados, están siendo solo utilizados por los que “más tienen”.  Y a no ser que esté muy equivocado, son para evadirse de la obligación de pagar una parte muy sustancial de sus impuestos.

 En principio, no estoy en desacuerdo con los impuestos, es más los considero indispensables. El Estado al igual que sus ciudadanos, necesitan de unos ingresos para poder subsistir,  para desarrollar sus actividades y para cumplir sus compromisos. Los ingresos del Estado provienen de los impuestos y por esto, vuelvo a decir que en principio no hay nada que objetar.

Pero los impuestos para ser justos deben ser ante todo proporcionales y progresivos en función de las rentas percibidas por el contribuyente, condición que solo pueden cumplir los impuestos directos, entre los más conocidos el I.R.P.F y el Impuesto de Sociedades. La  Hacienda española no parece tener muy claro estos conceptos progresividad y proporcionalidad, pues gracias a las desgravaciones e incentivos, las grandes empresas y las grandes fortunas contribuyen bastante menos que lo que les corresponderían en  proporción  con en el P.I.B.  No hablemos ya, pues otro tema muy largo y espinoso donde tributan esas grandes empresas.

Esa misma razón de progresividad es la causa de que por naturaleza los impuestos indirectos sean injustos. Al ser  su importe  independiente de las rentas quienes tienen que abonarlos. No obstante su injusticia intrínseca,  por su facilidad de recaudación, son los aparentemente preferidos por los gobiernos, no solo del español, si no también  de toda la UE, como el caso más destacado y evidente como es el IVA.

Pero faltan unas cuestiones capitales al referirnos al tema de los impuestos: su distribución y la transparencia en su aplicación.

Para la aceptación de unos impuestos, los ciudadanos tienen que percibir que reciben unas transferencias a cambio. Entre las más sensibles podemos citar las que refieren: : al sistema educativo, a la sanidad pública, a las pensiones,  y en  general en todas las que contribuyen al bienestar de la sociedad. 

Difícilmente aceptarán que sus aportaciones al Tesoro Público,  sirvan para mantener privilegios de casta, como las pensiones a los políticos que cesan en sus cargos, a las auto-retribuciones que se asignan. Tampoco se aceptan tapar los enormes agujeros que dejan los gestores de algunas entidades privadas, por la a veces delictiva gestión de sus directivos, en lo que podríamos definir como: Socializar las pérdidas y privatizar las ganancias.

Con respecto a opacidad y falta de transparencia, baste mirar la Casa Real Española y compararla con la Casa Real Británica. Donde se puede ver claramente que aunque no nos guste la institución como tal, hay Monarquías y Monarquías.